Genesis 12:1 – 12
“La Historia
de Abram y la Promesa utópica de Dios”

La
historia envuelta en una narrativa de esperanza, promesas, nudos y desenlaces
nos lleva a la creación de un pueblo fuerte y vigoroso escogido por Dios, escrito
para que la fe de las personas alcance nuevas fronteras y se desarrollen en
nuevos propósitos. Las personas necesitan sentir que el Dios que los hace pasar
por momentos difíciles y que luego les da alguna clase de promesas, es el mismo
Dios que está dispuesto a cumplirlas.
Creo
que no hay cosa más frustrante que el luchar por un sueño que no ves cumplir
por años y que no tienes la total seguridad de que se va a cumplir, mi
preocupación es la forma en como las personas creen en que Dios podrá darles
sus más recónditos deseos, solo cuando le obedecen, pero al ver que pasa mucho
tiempo antes de observar lo prometido la resignación se apodera de ellos, pues se
resignan a tratar de ver lo invisible, aun así creyendo en que aquello algún
día llegara a ser una realidad, aclaro que no es una preocupación de un mal,
sino una preocupación por que la mayoría de personas siguen a un Dios Cumplidor
de promesas sintiéndose casi a las puertas de una frustración por no poder ver
el cumplimientos de la mayoría de ellas.